Tabi, el cómodo calcetín japonés

Los tabi o tabs, son calcetines tradicionales japoneses, complemento ideal de los kimonos, cuya la característica más relevante es su forma, con el dedo pulgar separado, (asemejándose a un guante para el pie), lo que les hace muy cómodos para llevar con los varios tipos de calzados como los zori (más tradicional) o getas (similares, pero mucho más informales). Hechos de algodón, para sujetarlos, los tabi disponían de cuatro o cinco cierres en la parte trasera llamados kohaze. 
 

Orígenes del tabi 

En el Japón más tradicional, solo las cortesanas tayu podían mostrar sus pies al descubierto; el resto, tanto en verano como en invierno estaban obligados a cubrir sus pies: en los meses cálidos los tabs  les aliviaba el sudor, y en los fríos les resguardaba de las bajas temperaturas. Hoy, como entonces, los tabi se visten antes de iniciar el ritual del kimono, a modo de ropa interior. Hay que señalar que es una prenda unisex, que llevan tanto mujeres como hombres,  siempre de color blanco en las ocasiones más formales y de color azul oscuro (ellos) o de colores (ellas) en acontecimientos más informales.
 

Tipos de tabi 

Actualmente existen dos tipos de tabi: los odori-tabi, hechos a medida, y los elásticos. Los primeros son de algodón, con suela de vinilo y los cierres kohaze en la parte trasera, de forma que se adaptan perfectamente a la forma de cada pie y este queda bien sujeto. Son los más usados por actores y bailarines, ya que protegen el pie, aunque son más delicados a la hora de su cuidado (hay que lavarlos a mano para que no encojan) y difíciles de colocar ya que los dedos deben quedar perfectos.
 
Los tabs elásticos son de nylon y los más populares hoy en día cuando se calzan las sandalias tradicionales japonesas: tienen solo dos tallas, pueden lavarse a máquina y se ponen y quitan de forma rápida. La variedad de colores y diseños están arrasando entre las generaciones más jóvenes de Japón.
 
En la antigüedad existían otro tipo de tabi, que no eran propiamente calcetines. Hablamos de los Jika-Tabi, una especie de bota (con la misma separación del pulgar), muy usada en los trabajadores de la construcción, carpinteros y otras profesiones que precisaban de un mayor apoyo en la punta del pie. La tela era más resistente y la suela era de goma, al estilo de las zapatillas deportivas.
Como dato curioso, señalar que la marca de neumáticos Bridgestone comenzó precisamente como fábrica de tabi:  en el año 1906, Shojiro Ishibashi heredó una pequeña sastrería parte, que poco tiempo después dedicó en exclusiva a la fabricación de tabs. Tras la Primera Guerra Mundial, con el país en ruinas y destrozos, Ishibashi comenzó a idear un Jika-Tabi más fuerte y de mejor calidad; para ello se fijó en las zapatillas de tenis estadounidenses y al poco tiempo consiguió su objetivo, dotando al calzado de una suela más resistente. Pero en el fondo Ishibashi tenía puestas sus miras en otro sector: las gomas para automovilismo. Y de ahí, un imperio de ruedas global.

 

Los ninjas portaban tabi 

La vestimenta de los temidos guerreros mercenarios ninjas,  era básica pero diseñada para hacer posible su libertad de movimientos. La chaqueta por ejemplo, era muy similar a la usaba hoy en día en artes marciales como el judo o el kárate, pero sin lazada o cordones para evitar engancharse mientras corrían o escalaban. Los pantalones eran cómodos, similares a los usados por los samurai, que vestían con los calcetines tabi y unas sandalias llamadas waraji.  Todo pensado para la comodidad y la libertad de movimientos.

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